CALENTAMIENTO GLOBAL Y LA CRISIS ECONOMICA

En un post anterior describía cómo las inesperadas nevazones e un invierno más frío al que estamos acostumbrados en la zona central de Chile elevó el Índice de Precios al Consumidor, eso sí sumado a la creativa especulación de empresarios chilenos, pues los precios de hortalizas se dispararon especialmente en las grandes cadenas de supermercados.
Esta simple señal muestra lo unido que va la problemática del calentamiento global con las economías a escala. Imaginemos que este invierno sea más frío y afecte seriamente o sencillamente neutralice la producción frutícola de la zona central de Chile, desde donde se produce la manzana, la uva (los vinos), las paltas, etc. Toda la potencia exportadora hortofrutícola caería y con ello nuestra economía.
En una noticia británica se mencionaba que el calentamiento global podría costarle al mundo más que las guerras mundiales y la gran depresión de 1930, haciendo mención a un informe que presentó el ex ministro británico Tony Blair, en que agregaba "los cambios climáticos eventualmente costarían al mundo el equivalente a entre 5 y 20 por ciento del producto interno bruto cada año".
Blair convocó a "acciones decisivas y arrojadas" para reducir las emisiones de carbono y evitar lo peor del incremento de temperaturas.
Veo con preocupación y debo reconocer que con algo de desprecio a los grandes empresarios criollos agrupados en sus grandes y avinagradas asociaciones que no muestran preocupación o acciones proactivas para enfrentar lo inevitable. Prefieren mostrar preocupación por los conflictos étnicos o las señales de trabajadores salmoneros en pos de mejoras laborales, exortando al gobierno de la doctora Michelle Bachelet para que los defienda, de las injusticias por ellos mismos cultivadas.
Mejor volvamos al informe...el autor es un economista del gobierno Nicholas Stern (ex economista del Banco Mundial), quien apela a actuar de inmediato para reducir las emisiones de carbono costaría aproximadamente 1 por ciento del producto interno bruto global.
"Eso es practicable", dijo. "Podemos crecer económicamente y proteger el ambiente".
"Todavía hay tiempo para evitar los peores riesgos del cambio climático, si actuamos ahora y actuamos a nivel internacional", dijo Stern en Londres.
"La tarea es urgente. Aplazar una acción una década o dos nos llevaría a territorio peligroso. No debemos permitir que se cierre esta oportunidad"